La alimentación representa alrededor del 60 al 75% del costo total de la producción de carne de cerdo; por lo tanto, un conocimiento profundo de los principios de la nutrición es esencial para mantener una industria porcina rentable. La alimentación con niveles de proteína más altos se ha asociado a mejoras en la composición de la canal, con un menor contenido de grasa intramuscular y de carne menos tierna. Por lo tanto, el objetivo del presente estudio fue determinar cómo los niveles variables de proteína, lisina, grasa y fibra en las dietas porcinas afectaron el crecimiento de los cerdos y la calidad de la carne. Para ese propósito, se seleccionaron un total de 12 lechones castrados cruzados (≈4 meses de edad y 63,5 kg) y se asignaron al azar en dos grupos: una alimentación comercial para cerdos (proteína min. 14%, lisina mín. 0,69%, grasa mín. 6,8%, fibra máx. 8,7%) y una alimentación enriquecida (proteína mín. 22%, lisina mín. 1,55%, grasa mín. 1,80%, fibra máx. 2,6%). Los cerdos fueron alimentados con las dietas experimentales durante 56 días. El peso corporal (PC) se registró semanalmente. Se midieron el peso de la canal caliente, el color NPPC, la firmeza NPPC, el veteado NPPC, el área del lomo y el espesor de grasa dorsal a nivel de la décima y la última costilla. Se calcularon el rendimiento de la canal y el porcentaje de magro.
Como resultado, hubo diferencias mínimas entre las dietas en relación con los pesos semanales y la calidad de la carne de cerdo. Sin embargo, con la dieta enriquecida hubo una mayor GMD para la semana 1 (1,21 kg vs. 0,76 kg). Esto es debido probablemente a la ganancia compensatoria relacionada con el cambio de alimentación. Los lechones alimentados con el alimento enriquecido tuvieron un mayor rendimiento de la canal (74,7 vs. 71,0%) y más grasa en la última costilla (2,79 cm vs. 2,03 cm). Además, la alimentación enriquecida dio como resultado valores de L* más altos en el lomo, pero no se observaron diferencias visuales de color NPPC. Los lechones alimentados con la alimentación enriquecida tendieron a tener puntuaciones musculares más grandes y áreas más grandes del lomo. Todas las demás mediciones y cálculos no fueron significativamente diferentes. Sin embargo, los lechones alimentados con la dieta enriquecida mostraron una grasa más firme que los lechones alimentados con una dieta comercial.
Estos resultados sugieren que las dietas altas en proteína y lisina y bajas en grasa y fibra conducen a un mayor rendimiento de la canal y aparentemente de color más claro. Por lo tanto, estas canales deberían dar un mayor rendimiento económico.
Price, H., Williamson, S., Henson, J., and Mc Keith, A. G. (2019). Effects of various levels of protein, lysine, fat, and fiber on swine growth and pork quality. Meat and Muscle Biology, 1(3), 157-157. https://doi.org/10.221751/rmc2017.152